martes, 21 de mayo de 2013

En el país de la Pasión futbolera


En el país de la Pasión futbolera

Referencia.
Definición de Pasión que da la Real Academia de La Lengua Española LAREA
La pasión (del verbo en latín, patior, que significa sufrir o sentir) es una emoción definida como un sentimiento muy fuerte hacia una persona, tema, idea u objeto. Así, pues, la pasión es una emoción intensa que engloba el entusiasmo o deseo por algo. El término también se aplica a menudo a un vivo interés o admiración por una propuesta, causa, actividad, etc. Se dice que a una persona le apasiona algo cuando establece una fuerte afinidad, a diferencia del amor que está más bien relacionado con el afecto y el apego.

Acercamiento.

Antes de venir a La Argentina, ya sabía que era un país en el que el fútbol es un tema de gran influencia en sus habitantes; una gran pasión (en Colombia también aunque la pasión de algunos hinchas en un tanto proteica, según la situación de su equipo), aunque, nunca imaginé qué tanto.
Estudio con chicos y chicas amantes del fútbol, estoy rodeada de amigos que viven fútbol, éste deporte ha sido fuente de inspiración para muchos directores  de cine argentino y del mundo, entre ellos Colombia; así es muy difícil que no me quiera empapar del tema, aunque no sea mi pasión, pero es muy interesante hablar con ellos y ver en sus rostros tantas ganas de jugar, tantos deseos de ir a la cancha, de sentir los 90 minutos como los últimos de su vida.

Pequeñas crónicas:

Claudia

Junio del 2011, Buenos Aires-Argentina, me encontraba en casa con Claudia, mi compañera de facultad realizando un trabajo para historia del periodismo, ella se sentía un tanto inquieta, enfadada, ansiosa; veíamos el partido (al cual ella no pudo asistir por casusa del TP de periodismo) en mi televisor un tanto arcaico. Yo sabía que ella era hincha del River Plate, lo que no sabía era con qué intensidad. Tristemente ese día River bajó a la B contra Belgrano de Córdoba, la situación hizo que Claudia no asistiera a clases al siguiente día, y que de sus ojos cayeran lagrimas de dolor por su River del alma.

Claudia es hincha de River desde pequeña y socia del club  hace tres años; fue por primera vez a la cancha en noviembre de 1997, cuando tenía 15 años, River ganó 2 a 1 frente al Club Atlético Newell's Old Boys.

“Subí las escaleras muy rápido, cuando llegué a la tribuna no lo podía creer, casi me pongo a llorar; fue el día más feliz de mi vida”, me cuenta con una sonrisa que casi se sale de su cara. Se llevó todo lo referido a un carnaval, porras rojas y blancas, papel picado, ah, y un anotador; cuando la mujer guardia de seguridad le pregunta para qué el anotador, ella le explicó: “por si algún jugador me firma un autógrafo”, esto lo cuenta riéndose piensa que en ese momento era muy inocente, pero luego aclara, “River es mi pasión”.  

Eli

Septiembre 2012, Buenos Aires, Argentina, entro a su cuarto y lo primero que veo es una camiseta del Club Atlético Boca Juniors firmada por algunos jugadores, sigo y veo su cubre cama, posters, (un montón de libros, y libros, casi no se puede caminar por su cuarto, son muchos libros), bufandas y camisetas de uno de los equipos grandes de Buenos Aires Capital. Ella  es hincha del Boca desde pequeña, al igual que su padre y su hermano, son socios del club y seguidores de éste con ahínco. Va a la cancha desde muy chica y habla de cada jugador y técnico con tanta propiedad que asusta.

Eli no es sólo hincha del Boca Junior, ella es hincha del fútbol, ama el fútbol como lo amaba su abuela materna, una mujer con un estilo particular, hincha del Boca en contra de todos sus familiares.

La pasión también tiene sus matices, y en el caso de Eli ha cambiado su color, Boca sigue siendo su equipo del alma, parte de su vida y de su profesión. Una vez que comenzó a estudiar periodismo cambio su visión respecto a la pasión sobre el fútbol, la dejó en algo más racional.

Aun así, cuando le pregunté qué era para ella Boca, esto me respondió: “Boca  es una pasión que pocos comprenden, un amor que no se compara con ninguno. Esa emoción que te agarra cuando caminas por las calles de La Boca con tu gente, tus hermanos. La irracionalidad de abrazarte con el primero que tengas al lado cuando gritas un gol. Extrañar los colores cuando no podés ir a la cancha. El pulso acelerado de un penal por patearse. La indecisión por creer o no en las cábalas.
Boca es mi vida, aún ahora cuando trabajo en el mundo del deporte. Boca es mi amor, por Boca he dejado familia, amigos, novios. Boca fue mi primera palabra y seguramente también sea la última”.


David

Junio del 2012, domingo, La Plata Argentina; yo hablando, hablado y hablando (como tengo por costumbre) con mi amigo David, al fondo se escuchaba la narración de un partido de fútbol; Inglaterra Vs Italia (Penales). Por un momento mi amigo se quedó cómo sin aire, en la sala se oía un Goooooool, él me miraba desesperado, yo bla, bla ,bla, bla; él quería salir corriendo, yo bla, bla, bla, bla. El rostro de David cambió de colores, yo hablaba cetáceo. Rápidamente hizo un alpin pause, me dejó y salió a ver el gol.

David es colombiano, hincha de Millonarios uno de los grandes equipos de fútbol de Bogotá. Compró acciones del club (estrategia de Millonario Fútbol club  para salvar al equipo). Como muchos hombres, soñó con ser futbolista, supongo que uno de los mejores.

En mi vida en Colombia conocí a hombres que aman el fútbol (mi hermano Alfredo desayunaba, almorzaba y cenaba fútbol, hacia unos goles maravillosos en sus sueños…hasta caerse de la cama),  de hecho nos catalogamos como el país del sagrado corazón de Jesús, reinas y fútbol; pero nunca conocí antes un hombre que lo amara tanto, para David es parte de la vida, es una forma de concebirla, en una escala de importancia es lo más importante de lo importante.

El año pasado Millonarios quedó campeón de la Liga Postobón, y sumó su estrella 14, lo cual generó mucha felicidad en él y en muchos hinchas. La felicidad fue extrema. Nadie puede explicar con palabras lo que hace a un hincha, es algo que se siente y ya, es sólo de sentir; como escribió alguien en un blog (http://mascausasjustas.wordpress.com/2012/12/17/por-que-seguir-amando-el-futbol/)  que llamó la atención de David: La felicidad de los seguidores al ver su equipo ganar, en un contexto que quizá hayan tenido un día no tan bueno, o peor, una vida no tan buena, y que así sea por un rato su vida sea más linda. Ver a los amigos felices por la felicidad del hincha así no sean del mismo equipo, y en entre otras o entre más…ver la vida con una enorme sonrisa, “sólo” porque el equipo del alma ganó una copa, sumó una estrella más y materializó el sueño de muchos.

“Lo que realmente me haría feliz en la vida, es trabajar en algo relacionado con el  fútbol”-dice David con una sonrisa en sus ojos claros, casi azules, como el azul de Millonarios-.


Petruccelli.

Noviembre de 2012, 10:00am, desayuno en Mac’donals  Buenos Aires, Argentina. “Che sofi, qué ganas de estar jugando a la pelota. Si me dicen que debo madrugar a cualquier cosa, me da una fiaca (pereza) pero si me dicen que debo estar listo  a las 5:00am  para jugar a la pelota ni lo pienso, sabés…me levanto con ánimo”.  

Para él es inconcebible no ir un sábado a jugar a la pelota, es un sacrifico realizar otra actividad en las horas que él tiene para jugar. Al igual que la música (Guitarrista en Labustrina-espacio publicitario-)  leer, el cine, el fútbol son su pasión; éste la último, su mayor pasión.

En las prácticas de radio, en nuestras juntadas, en el subte, en los correos que nos enviamos con los chicos de la facultad respecto a lecturas o lo que sea; siempre, sin falta, Petru, habla sobre fútbol, Messi y obvio sobre el Independiente Avellaneda.

Habla de Messi con tanta furia, con tantas ganas, con tanto orgullo de ser argentino y que sea “el mejor de los argentinos- futbolista-”, como cuando habla  Cristina Fernandez de Kitchner, a quien ama como a su madre, la de él.

“No es que la vida sea sólo fútbol es que el fútbol es la vida”

Cine

Aun estando en Colombia había visto algunas películas relacionadas con el fútbol como “El camino de san Diego”- del director Carlos Sorín,  o la película chilena “Mi mejor amigo” dirigida por Alex Bowen o  “Pelota de trapo”, dirigida por Leopoldo Torres. El último film que vi sobre el tema del fútbol, (Villa, dirigida por Ezio Massa[1]) dejó en mí una sensación de una realidad que si bien la veía, no la había sentido. Mi percepción al respecto era neutra. 

Hoy tengo otra visión sobre el fútbol y la cultura argentina. La pasión argentina por el fútbol, trasciende límites, ya sea familiar, sentimental, social y hasta racional. El insertar en el cine el tema del fútbol como hecho social ha permitido una corroboración de lo importante que para algunos es éste deporte, lo que la esférica logra hacer en familias, individuos, empresas, ciudades, entre otros. Lo que se puede hacer por amor al fútbol, todo puesto en escena con mucho de subjetividad, por supuesto.


Sentir

No es gratis que hoy se haya incrementado en mí una suerte de seguir más de cerca a mi equipo de fútbol América de Cali, no soy apasionada con el tema, no es mi pasión; pero ahora veo con más convención éste deporte, entiendo la felicidad de los hinchas y puedo compartir con Lio, Petru y Mati la idea de ir a la cancha del Club Atlético Independiente (equipo adquirido en Argentina, por amor a mis colegas).

La pasión, la alegría del Gol, la locura del fútbol; es algo indescriptible. Ver llorar a un hombre es un momento único, he visto lagrimas de felicidad y de tristeza por fanáticos (hombres y mujeres) futboleros; respiran fútbol, el amor les sale por los poros y despliegan un aroma que invade y atrapa, incluso al más escéptico en el tema.

Creo en la sana pasión y lo ideal sería que así fuera, sano, deporte y buen juego. Todo depende de la persona que lo profesa, así que no se debe generalizar cuando hay violencia, más bien se deben rechazar los actos violentos con actos de civismo y ejemplo.

Fútbol: Es algo así como sentir mariposas en el estomago cuando un individuo se enamora. Se comparte, se sufre, se vive, hay desilusiones y alegrías y se promete amor hasta el final de los días.

Una pasión más en el país de las pasiones, ésta, la pasión futbolera.